1 sept 2012

Los cinco grandes

La expresión “los cinco grandes” o the big five fue acuñada para agrupar a los cinco animales más difíciles de cazar, por el peligro que supone enfrentarse a ellos, desde el suelo, con un rifle en la mano. No he podido averiguar quién fue el primero en usarla o quién el autor de la misma. Sin embargo viene utilizándose desde los primeros safaris de cazadores míticos como Selous, Finch-Hutton, Blixen y tantos otros de aquella época romántica.

El término “grande” –big– no tiene nada que ver con el tamaño de la fiera. La lista reúne cinco especies de entre las más representativas de África: león, rinoceronte, elefante, búfalo y leopardo. Algunos pretenden sustituir al rinoceronte por el hipopótamo, que suele identificarse como el animal africano que más muertes provoca a lo largo del año. Otros, en cambio, consideran que el búfalo de El Cabo y el cocodrilo podrían ser, con igual mérito, candidatos a este equívoco honor.

A partir de la emisión de 1999, cada uno de los cinco billetes de banco sudafricanos –valores de 10, 20, 50, 100 y 200 rands– muestra la imagen de uno de los cinco grandes.

Desde el punto de vista de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN), el león y el elefante de la sabana están catalogados como especies “vulnerables”. El leopardo, a punto de alcanzar el nivel de “en peligro”, mientras que el búfalo se sitúa en la escala más baja del riesgo. En cambio, el rinoceronte –blanco o negro– se encuentra “en peligro de extinción”. Si no se acaba con las mafias, los rinocerontes tienen los días contados.

La personalidad y los hábitos de estos animales son muy variados. El más difícil de observar es el leopardo, por sus costumbres nocturnas y porque suele pasar la mayor parte del día en lo alto de cualquier acacia, a veces en la que menos se espera, que le sirve como refugio, torre de observación y despensa.

SouthAfricaP126b-100Rand-(1999)-donatedsrb_fDe naturaleza generalmente apacible, el búfalo es, sin embargo, el animal más temido por los cazadores por lo imprevisible de sus embestidas, a menudo mortales. Cuando se siente atacado, la manada forma un círculo compacto protegiendo a los jóvenes en su centro, ofreciendo un entramado ofensivo y defensivo de cuernos amenazadores que nadie se atreve a enfrentar.

Del rinoceronte me ocupé en detalle hace unos meses.

El elefante, como dijo La Fontaine “es, si no tenemos en cuenta al hombre, el ser más impresionante de este mundo”. Se le describe como dotado de una gran inteligencia, aunque personalmente me cae bastante mal desde que una tarde decidió venir a por mí –orejas desplegadas, trompa en alto y cara de pocos amigos– porque le estaba tomando unas fotografías mientras el bruto arrasaba la vegetación con su enorme apetito de casi 200kg de forraje diarios.

¿Y qué decir del león? Su cabeza es uno de los símbolos más universalmente reconocidos en la cultura humana. Desde la antigüedad se le proclamó el rey de los animales, el rey de la selva. Holgazán e indolente por naturaleza, incondicional de la siesta, se pasa casi 18 horas somnoliento mientras las hembras –atletas de 150kg– cazan para el clan. El macho conserva la supremacía sobre el grupo, es el primero en alimentarse de las presas aportadas por las damas y se reserva el derecho a matar a las crías de camadas anteriores. Cuando la leona está dispuesta –durante una semana o algo menos– se aparea unas 40 veces al día de promedio.

Se lo tiene bien montado el rey este.

 


IMÁGENES: Arriba, los cinco grandes en una composición pictórica cuyo autor no he podido identificar. Abajo, búfalo en el billete de 100 rands.

4 comentarios:

Ignacio dijo...

Félix contigo aprendo lo mismo que con Punset, más incluso. Oye, que percibo cierta retranca en la última línea.

Y nuestro monarca Borbón se habrá pasado por el rifle a los big five?

Óscar Doyle dijo...

El buey macho de agua originario de la India y muy criado en la Mesopotamia de Argentina, es tambien muy bravo con los cazadores o tal vez gente "curiosa", (sin saber de su peligro), ya que se te avalanza y te "avalanza" y te carga con una fuerza descomunal!!, es bravo y fuerte!
Saludos

Guillermo Horacio dijo...

Cuando se juntan la capacidad de observación, mucha imaginación y una buena pluma, que es esa habilidad que pocos tiene de expresar en palabras el pensamiento, podemos definir eso que llamamos... talento.

He leído, y puedo decir que pase un día en África. Es que la narración y la imaginación hacen muy buena combinación, quizás no solo hubiese sido un día sino quizás todo un año, de no ser que me falto el vino para acompañar este momento.

Gracias amigo por hacer volar mi imaginación, ya tengo tu blog registrado y ten por seguro que la próxima, junto con la lectura no faltara un buen vino. Si de algo te sirve te adelanto que por cada frase o parrafo crudo e ingenioso hare un brindis a tu salud pues eso, el ingenio, vale la pena celebrarlo.

José Miguel dijo...

Querido Félix:
Por fin leo tu blog.¡Vaya descubrimiento!.Desde ahora creo que te leeré a menudo. Ya se lo he recomendado a Inmaculada. Recibe un fuerte abrazo y hasta siempre.
José Miguel